La profesional de la salud había sido denunciada como desaparecida y, tras una investigación, fue encontrada sin vida en las inmediaciones de un cementerio.
Luego de más de dos días de búsqueda, personal de la Policía de Formosa encontró muerta en un descampado a Gisela Agustina Mendoza, una enfermera que había sido denunciada como desaparecida por su ex pareja el último domingo.
La mujer, de 37 años, presentaba signos de violencia y un día antes de su hallazgo la fuerza de seguridad provincial había detenido preventivamente a su novio, el principal y único sospechoso del femicidio.
En diálogo con medios locales desde el lugar del hallazgo, el comisario inspector Héctor Candia, jefe de Delitos Complejos de la policía provincial, confirmó la aparición de los restos de Gisela en un descampado, a pocos metros de la cinta asfáltica de la avenida Alicia Moreau de Justo, en inmediaciones al cementerio del barrio San Antonio, en la capital provincial.
Se había radicado una denuncia el día domingo en la subcomisaría del barrio Guadalupe, donde la pareja había comentado que “alrededor de las 9.30 del domingo, él había bajado a la mujer en Corrientes y Filo, y a partir de ese momento no se la vio más”, explicó el comisario Candia.
Gracias a las tareas realizadas por los investigadores, que incluyeron el análisis de cámaras de seguridad, se pudo determinar que el denunciante había ingresado a la zona del hallazgo solo, a bordo de una motocicleta, lo cual fue clave para comenzar a realizar todas las conexiones con el hecho.
“Se lo ve ingresar hacia el sector del barrio San Antonio junto a la mujer, y otros testimonios luego indicaron que había salido solo del lugar. Y hoy, con el trabajo de los canes de la policía de la provincia, se llegó hasta este lugar”, detalló la autoridad.
Consumado el hallazgo del cuerpo de Mendoza, el juez de instrucción y correccional de la Primera Circunscripción Judicial de feria, doctor Enrique Javier Guillén, dispuso la apertura de una causa judicial contra la ex pareja de la víctima -ya detenido- por los delitos de privación ilegítima de la libertad y presunto femicidio. Aunque tras la aparición del cuerpo se espera un cambio de carátula a femicidio.
“El cuerpo presentaba indicios de haber sido objeto de algún tipo de agresiones”, puntualizaron los investigadores.
Al confirmarse el lamentable final de Gisela, desde el Núcleo de Educación Permanente y Formación Profesional (NEP y FP) N°31 “Atilio P. Lezcano” de Formosa, donde la víctima se había formado como auxiliar en Cuidados Gerontológicos, emitieron un sentido comunicado para despedir a la enfermera.
Cronica.com