El puntano Fernando Salino, presidente de Convicción Federal, anticipó su voto en contra, y reveló que dentro de su espacio hay legisladores que tienen “menos discrepancias” que otros con el proyecto.
El senador nacional Fernando Salino, presidente del bloque Convicción Federal -dentro del interbloque Popular-, admitió que su bancada podría dividirse a la hora de votar el Presupuesto 2026, luego que trascendiera que algunos integrantes del espacio acompañarían en la votación en general el proyecto del Gobierno.
“Creo que la Argentina necesita Presupuesto, en el bloque Convicción Federal estamos viendo la posición de cada uno de los cinco, cada uno representa a provincias distintas”, dijo sobre el bloque que integran, además de él, la jujeña Carolina Moisés; el riojano Fernando Rejal; el catamarqueño Guillermo Andrada; y la tucumana Sandra Mendoza, última en sumarse.
Salino dirige el bloque de legisladores con impronta y agenda “federal” que a comienzos de este año se alejó de la bancada comandada por José Mayans, aunque se mantuvieron y actualmente mantienen dentro del interbloque peronista/kirchnerista, hoy conformado por los bloques Justicialista, Convicción y Frente Cívico por Santiago, bajo el nombre Popular.
En declaraciones con radio Rivadavia, el puntano confirmó su voto: “Yo voy a votar en contra del Presupuesto”. Y, en cuanto a sus pares, expresó que van a “evaluar la situación, ver cuál es la mirada. Algunos tenemos más discrepancias, otros tienen algunas menos, pero no es el Presupuesto que claramente nos gustaría a ninguno de los cinco”.
“Seguramente no tendremos una posición uniforme”, afirmó. Además, cuestionó el debate exprés de la ley de leyes. “En la Comisión de Presupuesto hubo un atropello, esperábamos un tratamiento mucho más profundo y equitativo. Nuestras preguntas no han sido del todo respondidas”, señaló.
Para el opositor, “el oficialismo no terminó de resolver las diferencias que tiene; hay sectores que pretenden que corrijamos lo que pasó en Diputados”, indicó en referencia al Capítulo XI que fue rechazado en la cámara de origen y proponía la derogación de leyes insistidas por el Congreso.
En esta línea, consideró que “si el Ejecutivo presiona en este sentido se le va a dificultar”; mientras que si se vota el texto tal cual salió de la Cámara baja “aparentemente los votos están”.
“Que a nosotros no se nos respete la proporción y no se nos permita trabajar en el Presupuesto no contribuye en nada a que nosotros aportemos positivamente”, se quejó sobre los lugares que le dieron al peronismo en las comisiones. Al mismo tiempo, consideró un “error garrafal” del Ejecutivo que “tendría que tener otro diálogo con los legisladores” porque “en definitiva somos quienes tenemos que votar”.
Sobre la iniciativa, Salino criticó el artículo 30 que prevé la derogación de artículos de leyes que hacen al financiamiento en educación, ciencia y defensa. “Yo fui ministro de Educación de San Luis, no puedo aprobar el artículo 30. Fui rector de la Universidad de la Punta, no pudo aprobar el artículo 30”, manifestó.
Por otra parte, observó que “el Ejecutivo celebra volver a endeudarse. No propone salirnos de la deuda, sino seguir endeudándonos y crear condiciones para nuevos elementos de deuda”.





















