El gobernador salteño encabezará este jueves una reunión con sus pares de Misiones, Tucumán y Catamarca. También hay conversaciones con exlibertarios. El factor Pichetto, por ahora fuera de Provincias Unidas.
Horas frenéticas de negociaciones y “rosca” atraviesan la previa de la jura de los nuevos diputados nacionales el próximo 3 de diciembre y, de cara a ello, la expectativa por la conformación de un interbloque referenciado en los gobernadores del norte grande que se transforme en la tercera fuerza del recinto gana posibilidades.
Si se concretan los planes del gobernador salteño, Gustavo Sáenz, quien busca atraer a distintos sectores a este nuevo espacio, el prometedor -en la previa de las elecciones- Provincias Unidas quedaría relegado a un cuarto lugar dentro de la conformación de un cuerpo que estará definitivamente polarizado entre La Libertad Avanza y el kirchnerismo.
Ante ese escenario nadie quiere quedarse en soledad: a mayor volumen, más chances de entrar en el reparto de poder sobre cargos (vicepresidencia del cuerpo, por ejemplo) e integración de comisiones. Y esa es la pulseada que se dirime por estas horas los distintos grupos de gobernadores.
A la estructura que ya funcionaba bajo el nombre de Innovación Federal, con representantes de Salta y Misiones (el oficialismo de Río Negro ya no contará con legisladores en este bloque), se sumarían los diputados que responden a los mandatarios peronistas Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Raúl Jalil (Catamarca). El primero ratificó que continuará afuera de Unión por la Patria, mientras que el segundo confirmaría finalmente la salida de sus legisladores.
Tentado por ingresar a este armado aparece además el santiagueño Gerardo Zamora, que asumirá como senador nacional, pero es el jefe del Frente Cívico. Maneja los 7 diputados en total que hay por la provincia. En la Cámara baja todavía hay quienes dentro de UP aseguran que se mantendrían dentro de la bancada que se rebautizará como Fuerza Patria, pero con “permitidos” a la hora de colaborar con el oficialismo ley por ley.
Sin embargo, de mostrarse este jueves en la Casa de Salta en el encuentro organizado por Sáenz y anunciar un pase, UP sufriría -además de los cuatro que sacaría Jalil- otras siete bajas que terminarían definitivamente de consagrar a LLA como primera minoría. Hoy el oficialismo está por debajo del peronismo/kirchnerismo por muy poco, aunque también mantiene expectativa de sumar algunos miembros más.
El nuevo interbloque referenciado en los gobernadores del norte grande estaría compuesto por tres salteños, cuatro misioneros, tres tucumanos y cuatro catamarqueños. Y se sumaría desde la Patagonia una diputada neuquina que responde a Rolando Figueroa. Así, serían un total de 15. Con los santiagueños se irían directamente a más de una veintena.
Se sumen o no los representantes de Santiago del Estero, desde el sector de Sáenz también hay conversaciones para seducir a otros legisladores. Se trata, según supo parlamentario.com, de los integrantes del interbloque Desarrollo y Coherencia, hoy conformado por cuatro exlibertarios y dos del MID. Ninguno responde a gobernadores de sus provincias, con lo cual los intereses a defender no se comparten, pero desde ese espacio de seis sostienen que quieren ser parte de una oposición dialoguista que acompañe cuando lo considere, pero que no esté sujeta al oficialismo.
En la previa de la cumbre en la Casa de Salta, este miércoles se supo que la dupla Miguel Pichetto-Nicolás Massot no serían parte del nuevo bloque de Provincias Unidas, espacio liderado por los gobernadores Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Martín Llaryora (Córdoba) e Ignacio “Nacho” Torres (Chubut). Por este sello también compitieron los radicales Gustavo Sáenz (Corrientes) y Carlos Sadir (Jujuy), más Claudio Vidal (Santa Cruz). Un sector de mandatarios que aspiraba a ser la fuerza que arbitre desde el centro, pero se verá si el armado de Sáenz se impone con más legisladores.





















