Volvió la turista argentina que estuvo desaparecida en Cancún: ¿Qué le pasó?
El paradero de la mujer fue incierto durante dos semanas. En ese tiempo se habría ocultado en una selva donde operan bandas de narcotraficantes. ¿Por qué?
María Belén Zerda, la turista argentina que estuvo 12 días desaparecida en Cancún, México, ya regresó al país luego de dos semanas de misterio sobre su paradero.
La mujer volvió en un vuelo comercial y acompañada de personal de seguridad. Su vuelta había sido resuelta el viernes, luego de que las autoridades mexicanas informaran que la habían encontrado viva.
Tras ser identificada fue trasladada a un centro de salud donde la sometieron a diferentes chequeos médicos a fin de constatar que se encontrara bien de salud. Estaba consciente y no tenía ninguna lesión más que rasguños.
María Belén hizo su primer contacto con la familia después de casi dos semanas a través de una videollamada. Antes de esa charla, sus parientes analizaban volar a México para acompañarla. Sin embargo, al verla a través de la pantalla y certificar que estaba bien, se definió que ella volviera a la Argentina.
La mujer de 38 años aterrizó pasadas las 10 en el aeropuerto internacional de Ezeiza. Guillermo, su hermano, y su mamá la recibieron entre lágrimas. “Nunca más me voy a ir”, les dijo la joven mientras los abrazaba y temblaba, según consignó Clarín.
“Primero la abrazó mi vieja fuerte, lloraba. Después me abrazó a mí, la abracé fuerte, nos pusimos a llorar. Fue como una mezcla de todo. Hasta que no la vimos aparecer con las valijas estábamos inquietos. Pensá que estábamos todos ahí esperando, contentos, pero podía haber sido al revés también”, contó el hombre al mismo medio.
Luego, empezó a revelar lo poco que pudieron reconstruir de qué pasó con María Belén en estas dos semanas. “Mucho de lo que supuse lo pensé por ese mensaje que ella mandó, el último, antes de desaparecer. Estaba asustada, la habían amenazado. La gente que la amenazaba tenía todos sus datos, sabía dónde vivía, dónde comía, conocía su entorno. Así que se fue a esconder. Se fue a la selva”, relató Guillermo, quien agregó que a su hermana le habían robado el celular y con él, todo el acceso a su información personal: sus redes sociales, su cuenta bancaria y todas las aplicaciones que usaba. “La chantajearon, la hostigaron, la asustaron. No tenía problemas con nadie. No es que un cartel de drogas o alguien la amenazó”, completó.
En su desesperación, de acuerdo con lo que informó su hermano, la joven se internó en la selva sola y con lo puesto. “Está muy lastimada de picaduras por haber estado tanto tiempo ahí y, aunque tiene rasguños y heridas, está bien. Allá le hicieron todo tipo de análisis para dejarla ir de México. Salió que está perfecta de la cabeza. Sólo tiene los rastros de haber estado expuesta a una naturaleza que no perdona”, expresó para luego agregar que María Belén les había dicho que la primera semana estuvo sin comer. “Después nos dijo que comía lo que encontraba”. Al momento del hallazgo, vestía la misma ropa que se había detallado en la denuncia: una musculosa tipo top color negro, un short claro y unas crocs verdes y blancas.
La mujer estaba desaparecida desde el 6 de abril. Su intensa búsqueda había comenzado el 10, cuando reportaron el hecho y se activó el protocolo Alba para dar con ella. El miércoles, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo, al cual pertenece Cancún, publicó en su cuenta de X una serie de comunicados en los que informó que los investigadores continuaban con las tareas para encontrarla y agregó que la mujer padecía “de esquizofrenia” y que “fue durante un episodio de esta enfermedad que corrió hacia un área selvática”. No obstante, Guillermo desmintió totalmente en diálogo con Infobae que su hermana padeciera algún problema de salud, mucho menos de índole mental.
Cronica.com
