Secta rusa en Bariloche: ¿Cómo desbarataron al grupo criminal y cuál fue la pista clave del caso?

El caso que sorprende a la ciudad de San Carlos de Bariloche, tuvo su génesis cuando una joven de nacionalidad rusa se presentó en el hospital local para internarse y someterse a una cesárea.
La ciudad rionegrina de San Carlos de Bariloche sigue conmocionada por el caso de la secta rusa que dejó varios detenidos y muchas preguntas sin responder, sin embargo, la justicia comenzó a “armar el rompecabezas” para saber cómo sucedieron los hechos.
Las sospechas locales se iniciaron cuando una joven rusa de 22 años (identificada como E.M.), se presentó para consultar sobre los trámites necesarios para internarse y someterse a una cesárea en el Hospital Zonal Doctor Ramón Carrillo, de dicha ciudad rionegrina, y en ese momento los médicos sospecharon del episodio.
El asunto es que la paciente no estaba sola, ya que dos hombres de la misma nacionalidad, se presentaron junto a ella y controlaban cada uno de sus movimientos. Las respuestas evasivas de esos acompañantes, sumado al hecho de que todo el tiempo les impedían hablar directamente con la joven embarazada, les hicieron pensar que algo raro había.
“La situación le llamó mucho la atención al médico que las atendió e inmediatamente hizo la denuncia”, explicaron fuentes policiales que participaron de la investigación.
Alerta en el hospital de Bariloche
Esa alerta médica desencadenó una investigación que culminó el último fin de semana con allanamientos de urgencia y la detención de 15 sospechosos de integrar una “organización criminal transnacional” con sede en Montenegro que estaría dedicada a la trata de personas, y cuyo líder ya tiene graves antecedentes en Europa.
Fuentes con acceso al expediente indicaron que “todo es materia de investigación” y que se intenta determinar si las jóvenes que aparentemente integraban la secta o estaban cautivas, eran sometidas sexualmente, algo que todavía no tienen acreditado.
Sin embargo, los investigadores ya tienen suficiente información como para inferir que las jóvenes estaban en una situación cuanto menos delicada. “Sí sabemos que la característica de la secta Ashram Shambala era la participación de las víctimas en orgías y sumisión sexual con los líderes”, confiaron.
Otro detalle que trascendió es que muchas de las presuntas víctimas están desnutridas y casi sin pelo, producto de una pésima alimentación: la tradición en la secta, aparentemente, es que primero coma el líder, que la segunda línea del grupo se alimentara de sus sobras, y que las jóvenes recién comieran después, lo que quedaba, que obviamente era insuficiente.
Detención en San Carlos de Bariloche
Tras la denuncia inicial, la Sede Descentralizada de Bariloche ordenó a detectives de la División Unidad Operativa Federal (DUOF) de la Policía Federal Argentina realizar “discretas tareas de vigilancia” para cuando la joven embarazada regresara al hospital para dar a luz.
Así lo hicieron, y el operativo no tardó en dar resultados, ya que cuando E.M. acudió para someterse a la cesárea que había sido pactada, los detectives de la DUOF Bariloche identificaron a las dos acompañantes, de 40 y 44 años.
En ese momento, personal de la Dirección Nacional de Migraciones determinó que ambas “tenían vencido el tiempo de permanencia legal en el país” y esta vez, las dos mujeres fueron detenidas, mientras se investigaba si formaban parte de una red de trata o si estaban vinculadas a lo que se conoce como “tour sanitario”: es decir, traer extranjeros al país y facilitarles la atención gratuita en el sistema público de salud, cobrándoles importantes sumas de dinero.
La situación avanzó cuando, poco después y acaso porque no hubo más noticias de las primeras acompañantes, otras dos mujeres rusas se presentaron en el hospital para preguntar por la joven y su bebé recién nacido. También fueron detenidas, en tanto, E.M. había dado a luz a un varón, y en paralelo a las detenciones, se dispuso que quedara bajo custodia policial, en tanto su mamá fue rescatada.
Sin pruebas contundentes sobre los delitos que se investigaban, poco después las cuatro mujeres fueron liberadas, pero la investigación conducida por el fiscal Arrigo no se detuvo, en busca de verificar la probable existencia de una supuesta red de trata. Poco después, y con más elementos, sí se ordenó la detención de un importante número de presuntos involucrados: el riesgo de que se fueran del país aceleró los tiempos.
“Ante la posible fuga de los integrantes de lo que se considera una organización criminal transnacional con sede en Montenegro, el fiscal Arrigo, con conocimiento del juez Zapata, ordenó una serie de detenciones de urgencia, tal como lo prevé el Código Procesal Penal Federal”, explicaron desde el portal oficial Fiscales, de la Procuración General de la Nación.
Arrestos en aeropuertos
En tanto, los arrestos se realizaron simultáneamente en el Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria de Bariloche y en el aeroparque Jorge Newbery de Buenos Aires. Según informó el Ministerio de Seguridad Nacional, “el viernes pasado, en la sala de embarque del aeropuerto de Bariloche, el personal policial advirtió la presencia de un grupo de ciudadanos rusos, integrado por un hombre y seis mujeres, las cuales presentaban síntomas de malnutrición”.
El hombre, presunto líder de la organización, intentó autolesionarse con una hoja de afeitar cuando fue detenido, y tiene antecedentes: según las autoridades, en Europa había sido condenado a 11 años de cárcel. Durante la requisa de sus equipajes, los efectivos encontraron pastillas que dieron positivo para clorhidrato de cocaína.
Cronica.com