Matías Jurado está acusado de múltiples crimenes. Ninguno de esos perfiles coincide con los familiares que denunciaron las desapariciones, por lo que podría incrementarse el número de asesinatos.
Continúa la investigación por los restos óseos encontrados en una casa de Alto Comedero en San Salvador de Jujuy, donde se acusa a un hombre llamado Matías Jurado de engañar a distintas personas en situación de calle con alguna promesa de trabajo o comida, para después matarlos.
En ese marco, la Justicia logró los restos de dos hombres que estaban desaparecidos en la casa de Matías Jurado, Sergio Sosa (25) y Jorge Anachuri (68). Sobre ellos, hay registros fílmicos que brindaron las cámaras de seguridad del Centro de Monitoreo en distintas secuencias, donde se los vio subir a un remís junto a Jurado.
Además, hay otras tres posibles víctimas con denuncia de paradero son Miguel Ángel Quispe (60), Juan Carlos González (60) y Juan José Ponce (51).
Ahora se identificó el ADN de otras dos personas cuya desaparición no había sido notificada. Estos nuevos perfiles se construyeron en base a unas manchas de sangre extraídas de una sábana que Jurado usaba como cortina de la ventana de su habitación y en una bolsa de arena que estaba en el comedor.
El fiscal Regional Guillermo Beller indicó que “son más de 200 las evidencias que se están analizando en este momento en el laboratorio de institución forense”.
Los investigadores encontraron un rastro de ADN en la ranura de un facón, entre el mango y la hoja. A su vez, mediante la prueba de luminol, hecha en gran parte de la casa, descubrieron que el sospechoso había limpiado manchas de sangre en una mesa, una heladera, sillas y otros muebles.
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