Además del resultado de la elección, la gran pregunta en el mercado es qué va a pasar el lunes 15 de noviembre con el dólar. Sin dudas, un debate que se está convirtiendo en un clásico tras la profundización del descalabro macroeconómica en el que cayó la Argentina desde hace una década. En la City Porteña, las reservas del Banco Central es el gran debate.
Como si se tratara de un tanque de nafta, el BCRA llega a esta elección con la reserva de las reservas. Si bien es cierto que desde la autoridad monetaria desmienten gráficos alarmantes a la espera de la cosecha fina, en términos generales su situación entre pasivos y activos no es la mejor.
El economista y consultor Gabriela Rubinstein insistió ayer (11/11) en que las reservas son negativas y que se están usando encajes a cuenta del ingresos que generará el campo a partir de diciembre:
El stock de reservas netas era de US$ 9.000 millones -incluyendo oro y DEG- y de reservas netas líquidas -solo incluyendo DEG- era de US$ 5.000 millones. Actualmente, las netas rondan los US$ 5.000 millones y las líquidas oscilan en torno a US$1.500 millones. Las netas disponibles (sin DEGs ni oro) eran de US$ 500 millones y ahora son negativas por US$1.000 millones
Esto es interesante porque coincide con el análisis el estudio Massot & Monteverde.
A su vez, Rubinstein comparó la previa de las PASO con las Generales: “El BCRA, en la semana previa a las PASO, debió vender US$370 millones en el MULC y unos US$70 millones en el mercado de bonos. Esta semana apunta a terminar con ventas en el MULC por US$350 millones y viene vendiendo a razón de US$200 millones semanales en el mercado de bonos. A fines de agosto, el BCRA tenía una posición vendida en futuros de unos US$400 millones y ahora superaría los US$4.000 millones”. En cuanto a la situación económica y financiera de la Argentina en general rumbo a las elecciones del domingo 14 de noviembre, el exfuncionario durante la Administración de Néstor Kirchner insiste en que “la actividad estaba creciendo 4{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} entre mayo y agosto mientras que desde agosto a noviembre estamos estimando que la economía se habría estancado con un crecimiento que podría rondar el 0,2{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2}”, punto sobre el que coincide también Diego Giacomini. Rubinstein continuó graficando: “Por esas fechas (en rigor la semana posterior a las PASO), el INDEC comunicaba una caída de la tasa de inflación mensual al 2,6{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} (venía de ser superior a 4{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} en abril y mayor a 3{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} en mayo, junio y julio), mientras que la inflación en septiembre y octubre se aceleró arriba de 3{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2}”. Por último, repasó: “El riesgo país estaba en torno a los 1.500 puntos básicos; ahora, no baja de 1.700 puntos básicos. Y las brechas, que ya eran altas, oscilaban en el rango del 85{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2}; ahora superan el 100{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} y algunas el 110{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2}”. “Como se puede observar el proceso de deterioro de las variables económico-financieras ha sido bien marcado dado el alto grado de incertidumbre que provocaron las PASO, más por la manera en que procesó ese resultado el oficialismo que por el resultado en sí mismo. El resultado del domingo nos puede llevar a territorios inexplorados”, remató.
Se instala un rumor en la City Porteña
Como decíamos al inicio de esta nota, a muchos lo que más les preocupa no es cómo saldrá la elección -en las PASO fue muy evidente el desinterés en general que hay por la dirigencia política; muy pocos se sienten realmente representados- sino qué va a pasar con el dólar y la inflación a partir del lunes 15 de noviembre. El periodista Marcelo Bonelli instaló el rumor de “un relanzamiento (del Gobierno) tras los comicios, aunque esto es imposible con un dólar que aumenta todos los días, y por esto en la Casa Rosada el próximo sábado se van a definir nuevas medidas económicas”. Según el economista, “ese día habrá muchas reuniones en la Casa de Gobierno y el lunes 15 de noviembre, al día siguiente de las elecciones, se anunciarán estas decisiones sobre el dólar y también monetarias. Los controles de cambios seguirán, pero habría algún cambio de estructura del mercado cambiario que se está por definir. Esta serie de ideas que se van a discutir ya las tiene Martín Guzmán y podrían tener cierto aval del Fondo Monetario Internacional (FMI). En este sentido, el organismo multilateral de crédito presidido por Kristalina Georgieva apoyaría una división del mercado de cambios, pero en forma ordenada. Porque lo que hay ahora, con 16 tipos de cambio, es un desorden absoluto.
La idea es que solo existan dos cotizaciones del dólar en la Argentina, pero para lograr este objetivo antes habrá un debate interno dentro del oficialismo. Guzmán ya había hecho esta propuesta cuando el dólar llegó a 150 pesos, lo que provocó un terremoto el año pasado