La situación pasó inadvertida por la mayoría de los testigos, pero los usuarios de las redes detectaron el detalle de la botella volando a centímetros del Presidente y las imágenes no han parado de replicarse. Las cámaras de los militantes registraron el proyectil de vidrio que parte de una pequeña multitud y termina impactando en la cabeza de uno de los custodios que circulaba junto al vehículo. El hombre, tal como capturó LA NACION, tuvo que retirarse a un costado mientras la caravana continuaba su trayecto de poco más de 2 kilómetros. La víctima sufrió un corte menor y fue atendido en la Casa Rosada misma por los médicos.