El acusado, que fue capturado ayer en la esquina de Gallesio e Yrigoyen de Zárate luego de varios allanamientos, está acusado de integrar la banda de al menos cinco delincuentes que ingresó el jueves por la noche a la carbonería ubicada en el kilómetro 12.800 de la ruta provincial 193 con el objetivo de asaltarla. Por el momento, confirmaron las fuentes consultadas por este medio, “Meneses es el único detenido”. A esta hora permanece alojado en la sede de la DDI de Zárate-Campana a la espera de ser llevado ante la fiscal Palacios.

De acuerdo con los primeros datos de la investigación, los delincuentes ingresaron al predio luego de atravesar un campo, y desde allí se dirigieron hasta la casa principal. Allí, sorprendieron a los integrantes de parte de la familia, mientras que la hija del dueño logró subir por las escaleras y avisarle a su padre, que estaba en la ducha. El hombre escapó del lugar por una ventana, saltó por un balcón y se dirigió a la vivienda donde residen los empleados.

Según fuentes judiciales, en base a vocero policiales, desde esa casa llamaron al 911 para advertir acerca del asalto, por lo que un patrullero se dirigió al lugar casi de inmediato. En paralelo, los peones salieron al predio para observar qué ocurría, cuando de repente fueron sorprendidos por uno de los delincuentes. Ambos empleados fueron llevados hasta la casa principal: a uno lo maniataron y el otro, como se resistió, recibió un culatazo que le produjo un corte en el cuero cabelludo.

Tras apoderarse de una importante suma de dinero, los delincuentes pretendieron escapar pero en ese momento llegaron los móviles de la Policía. Fue entonces que se inició el tiroteo, en el que además resultó herido en una pierna otro agente de la Bonaerense. El peón de 22 años, por su parte, fue ejecutado de un disparo en la cabeza. No está claro aún por qué lo mataron a sangre fría. Se presume que forcejeó con uno de los ladrones. Cantero, en tanto, fue herido en el costado izquierdo del abdomen y murió apenas llegó al hospital.

Según fuentes de la investigación consultadas ayer por Enclave, la banda huyó en sentido a Escobar, a bordo de un Volkswagen Up de color rojo. La calificación de la causa es homicidio, tentativa de robo, atentado y resistencia a la autoridad, y lesiones. Palacios, además, puso al frente de la investigación a la Gendarmería Nacional.

El hijo del propietario de la carbonería asaltada dijo a los medios que el hecho fue un “golpe comando”, que los delincuentes debieron realizar “cierta inteligencia” para poder cometerlo y que les exigían dinero a las víctimas mientras les decían que las habían “vendido”. Ramiro, otro empleado del lugar que no estuvo al momento del hecho, coincidió la hipótesis de que se trató de una banda muy preparada que sabía lo que hacía. “Los vecinos dicen que fue impresionante la balacera que hubo, no podían creer la magnitud de los disparos”, añadió.

Los restos del agente Cantero serán velados hasta las 15 en el Palacio Dorado de San Pedro, ubicado en la calle Carlos Pellegrini 150. A las 16 lo sepultarán en el Cementerio Portal de Paz de Baradero, situado en el kilómetro 145 de la ruta nacional 9, sentido a la ciudad. En tanto, los restos de Padrón serán velados por sus familiares y amigos durante el día y luego serán llevados al cementerio municipal de Escobar.

Fuente: https://enclave.ar/l