En línea con su política de “mano dura”, la candidata de JxC dijo que avanzará en la modificación del Código Penal, aunque la iniciativa choca con una acordada de la Corte Suprema y no está amparada por la Constitución. También quiere bajar la edad de imputabilidad a 14 años. Su pelea por los votos de derecha con Milei y su acusación de “inestabildiad emocional” sobre el libertario.

De la “pata rota” a un nuevo paso en falso. Luego de ligar su mala performance en el primer debate presidencial a “una gripe”, Patricia Bullrich parece seguir poco firme en el camino hacia el segundo debate del domingo próximo. Justo cuando uno de los temas a discutir será Seguridad, la ex ministra de Mauricio Macri abrió la polémica al proponer la modificación del Código Penal para que puedan grabarse las conversaciones de las personas detenidas, incluso las que mantengan con sus abogados defensores.

La iniciativa generó rechazo tanto desde el kirchnerismo como de los libertarios que responden a Javier Milei, con quien la candidata de Juntos por el Cambio salió a confrontar de frente en las últimas horas para pescar votos en el electorado de derecha. Hubo voces que advirtieron su “desconocimiento” en materia de derecho, al sostener que la grabación de las conversaciones de las personas privadas de su libertad va en contra de derechos consagrados por la Constitución Nacional.

“Grabo su defensa”, anunció Bullrich en una entrevista al canal Neura Media publicada ayer, donde la exministra de Seguridad propuso grabar las conversaciones de las personas presas, incluso cuando estén conversando con sus abogados defensores. Reconoció que no es un derecho constitucional y redobló la apuesta al querer impulsar una iniciativa legal: “Puedo ponerlo en el Código Penal”, dijo. 

“Lo puedo grabar, tenerlo como elemento de prueba. Puedo no escucharlo y tenerlo como un sistema de protección a esa comunicación”, añadió Bullrich durante la entrevista, en la que defendió su política de mano dura contra la inseguridad y la corrupción. Así como justificó la construcción de una cárcel de máxima seguridad –que según un spot de campaña, será bautizada como “Dra. Cristina Fernández de Kirchner”–, anticipó también que bajará la edad de imputabilidad a los 14 años y que si quien comete un delito tiene menos de esa edad recibirá “un tratamiento y régimen especial por su conducta”.

Desde el oficialismo salieron rápido a cruzar a Bullrich. “Imaginate lo que serían los planes de seguridad de una persona que desconoce el ABC del derecho constitucional”, sostuvo el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, en su cuenta en la red social X. También Graciana Peñafort, abogada ligada a la vicepresidenta y candidata a diputada por la Ciudad de Buenos Aires de Unión por la Patria remarcó que la Corte Suprema en la acordada 17/2019 establece la confidencialidad absoluta de las comunicaciones entre abogado y cliente como parte de la garantía constitucional de la defensa en juicio. 

“Barbaridades que se dicen cuando sos burra con ganas. Y lo que desconocés es la Constitución del país que pretendés gobernar”, remarcó Peñafort también en un tuit. La letrada añadió que igualmente ya “lo hicieron” durante el gobierno de Macri cuando se escucharon “charlas protegidas constitucionalmente entre detenidos y sus abogados”; se filmaron “reuniones como la de la ‘Gestapo PRO’” y  se espiaron “a propios y ajenos”, y sostuvo que “todo ello fuera de la ley”.

También desde La Libertad Avanza salieron al cruce de Bullrich. Agustín Romo, candidato a diputado bonaerense, sostuvo que la ex ministra “no tiene ni idea de absolutamente ningún tema ni de seguridad, donde supuestamente es experta”. En tanto, el postulante a vicegobernador de LLA, Francisco Oneto, recordó también la Acordada 17/2019, la llamó “Patricia Burrich” y sostuvo que “la única garantía que conoce es la de la heladera”.