Facundo Molares falleció cuando era detenido por la fuerza. Referentes de izquierda, gremiales y de derechos humanos apuntaron a la Ciudad, desde donde acusan una supuesta intención de darle tenor político al hecho. ( por Alfredo Leuco)


La muerte del militante de izquierda Facundo Molares cuando era detenido por la Policía de la Ciudad desató una ola de críticas hacia el Gobierno porteño, que respaldó el accionar de los efectivos y habló de una supuesta intención de darle un tenor político al episodio.

“Hoy en el marco de una manifestación con incidentes, falleció luego de una descompensación Facundo Molares. Lamento su muerte y extiendo mis condolencias a sus familiares”, sostuvo el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.

Más de dos horas después de confirmarse la muerte de Molares, el precandidato presidencial del PRO sostuvo: “Quiero destacar y respaldar completamente el accionar de la Policía de la Ciudad que actuó con profesionalismo conteniendo los hechos de violencia. En la Ciudad, la violencia es el límite”.

“Yo compito con Larreta, pero en esto estoy al lado de él”, sostuvo la precandidata presidencial de Juntos por la Patria, Patricia Bullrich en declaraciones a la prensa.

La ex ministra de Seguridad consideró que “quieren involucrar al Gobierno de la Ciudad” en la muerte del manifestante en el Obelisco y aseguró: “Las organizaciones que viven de los impuestos quieren sembrar caos”.

En tanto, el precandidato presidencial de Unión por la Patria Juan Grabois expresó: “Demasiada muerte, demasiada crueldad, demasiada violencia; que no nos sea indiferente la vida de nadie, no nos acostumbremos, no nos resignemos a esto. Volvamos a ser humanos. Mi solidaridad con la familia y compañeros de Facundo, muerto en manos de la Policía de la Ciudad”.

Por su parte, el postulante presidencial del Frente de Izquierda Gabriel Solano también expresó: “Acá hubo una detención. Cualquier causa de riesgo es eso, que no hubiera pasado si hubiera sido detenido”.

Según destacó, “hay una decisión política de reprimir sobre el final de la campaña” de parte del gobierno porteño de Horacio Rodríguez Larreta. “Hay una decisión política de reprimir. Dicen que tenía factores de riesgo pero si te dan un palazo en la cabeza no es un factor de riesgo”, se quejó el líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni.

También se sumaron al repudio del hecho agrupaciones de derechos humanos como Abuelas de Plaza de Mayo, que expresó: “Repudiamos la brutal represión de la Policía de la Ciudad que causó la muerte de Facundo Molares, militante y fotógrafo que se encontraba manifestándose en el Obelisco. Nos solidarizamos con sus familiares y exigimos que se investigue y castigue a los culpables #LaRepresiónMata”.

“Desde la CTA de las Trabajadoras y los Trabajadores repudiamos enérgicamente el asesinato de Facundo Molares Schonfeld, producto de la represión de la Policía de Ciudad bajo el mando de Eugenio Burzaco, cuando se manifestaba en forma pacífica con un puñado de personas frente al Obelisco porteño”, indicó la CTA de Hugo Yasky, lo mismo que hizo la de Hugo “Cachorro” Godoy.

Quién era Facundo Molares, el hombre que murió en la manifestación

Molares fue excarcelado en 2022, luego de que la Jurisdicción Especial para la Paz de Colombia suspendiera la solicitud de extradición que pesaba contra su persona. Es fotoperiodista y tenía 47 años. 

Estuvo detenido por un operativo que realizó la Interpol y la Policía Federal, tras una orden de captura emitida por el Gobierno de Colombia. En ese momento, el reportero gráfico fue internado, según especificó una nota La Izquierda diario, por un cuadro “de fiebre e hipertensión” en el hospital del penal de Ezeiza. 

“Facundo Molares ha sido internado por un cuadro de fiebre e Hipertensión en el hospital del penal de Ezeiza”, decía el comunicado difundido por la Coordinadora por la Libertad y Rebelión Popular. Además, habían advertido que su vida corría peligro: “Necesita una atención urgente en mejores condiciones que las que ofrece un hospital carcelario”. 

Molares y las FARC

Sobre su paso por la guerrilla colombiana, Molares detalló en un entrevista al diario Tiempo Argentino cómo fueron sus últimos días: “Hubo un proceso de desmovilización. Viajamos tres días en canoa remontando el río Putumayo hasta un pueblo llamado Las Carmelitas para entregar las armas”.

“Yo firmé un documento, que está en poder de las Naciones Unidas, eso impide la extradición. Dejé el campamento a la luz del día, me despedí de mis compañeros de 15 años. Sentí tristeza por el pueblo colombiano, porque su sufrimiento no terminó y se merece una vida mejor”, explicó Molares. 

Información de Noticias Argentinas