Llega a esta redacción la información, que diferentes oficiales femeninos que prestan servicios en la Unidad Operacional de Control del Narcotráfico y de Delito Complejo Central, de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), interpusieron presentaciones en el Fuero Federal tras padecer situaciones de «Acoso y Abuso Sexual» por quien sería la máxima autoridad de la unidad.

Las damnificadas habrían expuesto entre otras irregularidades, recibir tratos y tocamientos obscenos, situación que configuraría el delito de «Abuso Sexual Simple».

Hasta el momento habrían trascendido cuatro denuncias, aunque con el pasar de las horas las mujeres que se atreverían a denunciar aumentaría.

Los casos de Acoso y Abuso evidencian un modus operandis que se repite, incluso ante la presencia de testigos:

«…En septiembre de 2021 me empezó a decir que quería que sea su secretaria. Siempre desde el primer momento noté que me miraba lascivamente, me miraba la cola sin disimulo, y a principio de este año empezó de a poco a decirme piropos haciéndose el gracioso, y observaciones sobre mi cuerpo como; “que flaca que estas, te queda muy bien, a mí no me gustan las gorditas, me gustan así, como vos, me gustaría verte todos los días y si te venís a trabajar conmigo acá no haces nada, atendés el teléfono y cebas mate nomás”. Lo referido me lo decía siempre cuando estábamos solos ya que delante de otros siempre era muy correcto y se hacía el desentendido. También me saludaba con un beso y corría la cara dándome un beso en la boca…»

Esta forma de actuar se repite en todas las declaraciones, y cuando notaba que la persona acosada no accedería a tener relaciones sexuales comenzaban los maltratos y las descalificaciones.

Se transcriben extractos de declaraciones de varias damnificadas:

«…Luego empieza a mirarme los pechos sin ningún tipo de reparo ni disimulo, se tornó una situación muy incómoda…”

«…Como en tanto tiempo no había aprendido nada del trabajo, que porque estaba en una oficina si yo era operativa, y que me iba a sacar porque no lo merecía. Después me preguntaba; “Negrita vos sos madre soltera, ¿no? ¿Y si te mando a un equipo a trabajar en horarios raros con quien dejas a tu hijo, se te re complica no?»

«…Ni en pedo te dejo ir de la Unidad, me vas a tener a tener que aguantar así, feo y baboso como soy…»

«…Cuando me llamaba y yo iba para su oficina y él estaba con alguna otra persona se dirigía hacia a mí en una forma exageradamente correcta, me saludaba con choque de puños, no me tuteaba y llamaba por mi apellido, y siempre me hablaba de forma muy amable. Pero cuando estaba sólo siempre hacia alguna acotación sobre mí cuerpo. Una vez me dijo que estaba muy linda, que el pelo me quedaba bien de color tan oscuro, que me quedaba bien la credencial colgada a la altura de mis senos. Me miraba sin disimulo los pechos y la cola. Otro día que no recuerdo, pero fue a principio del mes de junio de este año, me llamó a su oficina y estaba sólo, y cuando ingreso quedo parada frente a él, y otra vez mientras me hablaba no me sacaba la vista de mis pechos y mi cadera, y veo que él se estaba sobando el pene con la mano por sobre el pantalón. Ahí me dice siempre mirándome los pechos: “SEEEE VOS RE DAS PARA SER MI SECRETARIA, NO VAS A RENEGAR MAS CON NADIE, YO TE QUIERO ACÁ CONMIGO, TE VOY A CUIDAR” …

«…Otra vez respecto de otro oficial vino a la oficina y me dijo que escriba un informe porque lo quería hacer echar y que iba a poner mentiras pero que las ponga igual porque él lo ordenaba, yo le manifesté que desde mi oficina no tenía nada que aportar a dicho informe y me dijo que escriba lo él me decía y que me quede “Bien calladita que el horno no está para rebeldes”. Al final solo lo redacté por miedo, él ya había demostrado que tenía apoyo de todos los Jefes, y de hecho al poco tiempo a este oficial lo desvincularon de la Fuerza. Ese día en mi casa tuve una crisis de angustia y de llanto, empecé a pensar en que pasaba si lo denunciaba, pero tenía un miedo terrible, él siempre se jactó de tener poder, de ser amigo de todos jefes supremos de la fuerza y todos sabíamos que era verdad, él siempre decía que si alguien se atrevía a denunciarlo le sacaba el pase a otra provincia, lo hacía echar, o pasar a disponibilidad, cosa que estaba comprobado era verdad, ya que lo había visto en varias oportunidades. Siempre decía que sus amigos “le eran muy leales y que nadie se iba a animar a traicionarlo” …

Otra funcionaria refiere: «…A mediados del mes de agosto de este año me llama a la oficina nuevamente, y después de hablar de algunas cuestiones de trabajo, en la tele que se encuentra en dicho lugar, pasaron algo sobre una marcha del Orgullo Gay, ante lo cual me mira se ríe y me pregunta ¿VAS A IR? Sic. Me pareció una pregunta desubicada, pero en ese momento me sonreí de los nervios, le dije permiso me retiro, y cuando estoy por llegar a la puerta de salida de la oficina que da al pasillo siento la mano de Él bien fuerte en el centro de mis glúteos y me dice: “QUEDATE”. Logré salir de la oficina aterrada. Desde ese día comenzó a tratarme mal, y en todas las circunstancias no perdía la oportunidad para humillarme, decirme que no hacía las cosas bien en el trabajo, y la mayoría de las veces no me lo decía directamente, pero él iba a una oficina donde había mucha gente y lo decía ahí, por eso después alguien me lo contaba, cosas como por ejemplo: «a esta la voy a rajar a la mierda, no hace las cosas bien, se queja mucho, me tiene cansado, la voy a denunciar por maltratar a su jefe o cualquier otra cosa, va a terminar en otra Unidad…»

«…Nunca dije nada porque tengo mucho miedo, él siempre demostró que, si alguien le hacia la contra lo hacía pasar a disponibilidad con alguna excusa o echar, lo mandaba de pase a otra provincia o lo perseguía hasta que saque un parte psicológico. Siempre decía que los iba a mandar a seguir sin orden judicial, que era amigo de todos los jefes supremos de la fuerza, manifestaba que tenía aliados entre los oficiales jóvenes a los que les hacía denunciar lo que él quería para ensuciar a otros oficiales que no eran de su agrado, y que por otros medios legales no habría podido sancionar, y que a estos oficiales jóvenes leales los recompensaba con puestos de trabajo superiores y que los usaba como ejemplo para que todos sepan que si uno hacia lo que él quería independientemente de la legalidad, les iba a ir muy bien. Que hay mucha gente que sufrió acoso de todo tipo, psicológico, sexual y laboral de parte de este oficial, pero todos incluyéndome, le tenemos terror no solo por las persecuciones laborales, sino que también miedo a que le pase algo a nuestras familias porque es muy pesado él dice que tiene amigos Jueces y amigos en la política…»

«…Las situaciones referidas están denunciadas en la Justicia Federal y tomo intervención Control Policial, la Procuraduría de Investigaciones Administrativas, y el Ministerio de Seguridad…»

«…Hay oficiales que refieren que el Centro Integral de Genero de la PSA no le brindó ningún tipo de apoyo, contención, asesoramiento, ni nada. A dos de las oficiales una mujer del Centro Integral de Genero les habría dicho que para denunciar a alguien tienen que ir por la vía jerárquica, y que para que se les brinde una medida cautelar de protección tenían que pasar las cosas por ellos, y que no se manejarían por radio pasillo…»

Las damnificadas estarían evaluando realizar también la denuncia ante el CIG, por abandono de persona e incumplimiento de los deberes de funcionario público, es de esperar que va hacer el director general de la PSA Jose Glinski que tome carta en el asunto con este panorama nefasto o será cómplice de estos aberrantes delitos contra el personal femenino que lo padece en persona.

FUENTE: Unión del Personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria – UPPSA

enclave.com.ar