Aquí algunas de sus frases más célebres:

* Una derrota peleada vale más que una victoria casual.
* La conciencia es el mejor juez que tiene un hombre de bien.
* Mi sable nunca saldrá de la vaina por opiniones políticas.
* Cuando la patria está en peligro todo está permitido, excepto no defenderla.
* Si somos libres, todo nos sobra.
* Mi nombre es lo bastante célebre para que yo lo manche con una infracción a mis promesas.
* Hace más ruido un hombre gritando que cien mil que están callados.
* La soberbia es una discapacidad que suele afectar a pobres infelices mortales que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder.
* Mi mejor amigo es el que enmienda mis errores o reprueba mis desaciertos.
* Mi juventud fue sacrificada al servicio de los españoles; mi edad mediana al de la Patria; creo que me he ganado mi vejez.

 El 19 de julio de 1819, el Gral. José de San Martín advertía a sus tropas sobre la inminente llegada de una expedición española y arengaba a pelear por la libertad.

En su proclama, cargada de emoción y valentía, el Libertador decía textualmente: «Compañeros del Ejército de los Andes: Ya no queda duda de que una fuerte expedición española viene a atacarnos; sin duda alguna los gallegos creen que estamos cansados de pelear y que nuestros sables y bayonetas ya no cortan ni ensartan; vamos a desengañarlos. 

La guerra se la tenemos que hacer del modo que podamos. Si no tenemos dinero, carne y un pedazo de tabaco no nos han de faltar; cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con las bayetitas que nos trabajan nuestras mujeres y si no, andaremos en pelota como nuestros paisanos los indios. Seamos libres y lo demás no importa nada. La muerte es mejor que ser esclavos de los maturrangos. Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano hasta ver el país enteramente libre, o morir con ellas como hombres de coraje.» (Fuente: elhistoriador.com.ar)