Una denuncia por la presunta utilización de ciudadanos muertos en las planillas de la campaña de vacunación contra el Covid-19 vuelve a poner bajo la lupa al gobierno de Gildo Insfrán en Formosa.

El caso fue revelado por el periodista Luis Gasulla en el programa televisivo La Cornisa, de Luis Majul, donde Nadia, hija de Agustín Rufino Acosta, quien falleció el pasado 23 de octubre, contó que su padre fue invitado el pasado fin de semana a recibir la vacuna contra el coronavirus en la escuela Nº 217, del barrio Bernadino Rivadavia, situado al sur de la ciudad de Formosa.

El descubrimiento se dio a partir de un listado de vacunación del gobierno provincial. Y acto seguido, denunció la ejecución del mismo procedimiento con otras personas ajenas a su círculo íntimo.

El informe de Gasulla expuso la existencia de una nómina de 80 personas, de las cuales 7 estaban muertas. En consecuencia, pudo dilucidarse que casi el 10 por ciento del padrón del plan de vacunación está conformado por fallecidos y que sólo el 21 por ciento de las vacunas fueron utilizadas. No se sabe el destino de 8 de cada 10 vacunas enviadas a la escuela de la capital formoseña.

Según el ex intendente radical de la ciudad, Gabriel Hernández, Formosa utiliza el padrón electoral para vacunar y el gobernador Insfrán no lo ha modificado a pesar de que en él figuran personas fallecidas y ciudadanos paraguayos.

En concordancia, el domingo 7 de marzo la administración de Insfrán convocó a adultos mayores de 85 años para ser inoculados. La concejal Gabriela Neme, detalló que solo se vacunaron 17 personas sobre las 80 dosis enviadas.

En Formosa no existe una inscripción online para vacunarse. Los ancianos se enteran de manera espontánea en qué escuelas se vacuna y, en caso de que reciban dicha información, se presentan sin turno previo.

A continuación, el informe completo: