El ex titular de la cartera de Hacienda durante el gobierno anterior salió al cruce del actual ministro de Economía por el modo en el que se vacunó contra el Covid-19 y por “negar la magnitud de la deuda que viene contrayendo”

 

Para este ministro, emitir USD 68.2 mil millones de nueva deuda para cancelar USD 65 mil millones de capital de deuda vieja representa una exitosa reestructuración de la deuda pública externa (Alfonso Prat Gay)

 

Luego de los tuits que publicó el ministro de Economía, Martín Guzmán, en los que dijo que el Gobierno no está tomando la deuda al 18{688a8ce96c256f08401d8e2f5c8db48dc2792b622bdd2a5bb1e6509fa5d7b8e2} en dólares, el exministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, salió a desmentirlo y lo llamo “negador”.

El economista escribió: “Hay un ministro que continúa negando la magnitud de la deuda que viene contrayendo desde el primer día en que asumió (ya supera los U$S21.000 millones)”, y agrego también que para Guzmán “tomar deuda en el mercado local ‘no cuenta’ porque no es deuda, sino ‘acumulación de financiamiento extra’(sic)”.

También, el exfuncionario afirmó que “emitir U$S68.2 mil millones de nueva deuda para cancelar U$S65 mil millones de capital de deuda vieja representa una ‘exitosa reestructuración de la deuda pública externa’ (sic)”.

Con la información dada en el Informe Mensual de Deuda, el economista confirmo que no deberían subestimar la deuda en pesos ya que “en su gran mayoría ajusta por inflación y es la que más rápido crece en USD, a pesar del atraso tarifario”.

Luego de estos comentarios Prat-Gay criticó al actual ministro por el alboroto del vacunatorio VIP, asegurando que Guzmán “aceptó vacunarse de manera clandestina para una gira que resultó innecesaria, como se lo confirmó el Presidente al mismísimo periodista que ‘se saltó aquella cola’ (sic)”.

Prat-Gay concluyó con lo siguiente: “Todos estos engaños se pagan caros: por algo los bonos de la ‘restructuración exitosa’ perdieron cerca de la mitad de su valor de mercado y la Argentina no recupera el crédito que sí abunda en el resto del mundo. La triste y costosa ‘picardía’ de siempre del Cambalache…”.