Tras hacer huelga de hambre por el trato sufrido en el centro de confinamiento de la provincia de Gildo Insfrán, 30 policías entraron a la casa del doctor Héctor López Cano “en busca de una toalla”
Antes de que viniera el Secretario de DDHH, empezaron a liberar personas. Dos días después de salir del hotel, 30 policías entraron a mi casa diciendo que me había llevado una toalla del hotel. Me revolvieron todo”, contó a Cadena 3 el doctor Héctor López Cano.
“Estaba en un hotel y le pedí a la gente del hotel que revisara el aposento y dijeron que no tenían el personal para hacerlo. Me dejaron dos horas y media en el hall del hotel hasta que me autorizaron la salida”, relató.
Según narró, el doctor fue escoltado hasta su domicilio, donde fue visitado dos días más tarde por tres patrullas móviles y una veintena de policías.
“Golpearon la puerta diciendo que tenían una orden de allanamiento y que si no colaboraba me derribaban la puerta y rompían todo”, indicó.
“Obviamente dije que colaboraba, pero que estaba en cuarentena, que solo podían entrar tres. Aún así, entraron los 20”, describió.
Cuando preguntó el motivo del allanamiento, le dijeron que era porque se había registrado que en la habitación donde había estado del centro de confinamiento faltaba una toalla y un control remoto.
“No entiendo el por qué del allanamiento, el hotel podría haberme llamado por teléfono para ver si me la llevé o llamarme y pedirles que se las pague”, cuestionó el médico.
En palabras de López Cano, “empezaron a dar vuelta todo”. “Le pregunté al comisario por qué, si estoy colaborando, me destrozaban las cosas, y dentro del todo me dejaron las cosas mas o menos en orden, me pedían que yo abriera los compartimientos”, agregó.
“Se llevaron una toalla mía, que dicen que tiene características similares, pero tengo como testigo a la señora que trabaja en mi casa, que sabe que la tengo hace mas de un año. Me pedían la boleta de la toalla, como si la guardara”, declaró.
Afirmó que aún están revisando su casa, y que está seguro de que el allanamiento se debió a la denuncia que hizo contra el Gobierno de Insfrán: “Acá cualquiera que levanta una voz critica, le hacen una persecución”, cerró.
Informe de Agustina Vivanco.