Diputados de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires presentaron un proyecto de ley para limitar las asignaciones y los beneficios sociales que reciben del Estado bonaerense a aquellas personas que usurpen tierras.

El proyecto fue presentado por diputado Alex Campbell -ex secretario de Asuntos Municipales de María Eugenia Vidal- y plantea que “no podrán acceder a los programas de asistencias sociales provinciales las personas u organizaciones sociales que participen o fomenten usurpaciones de terrenos y propiedades”.

Según el texto del proyecto, la restricción será por dos años a partir del momento en que las autoridades tomen conocimiento del delito de usurpación.

 

La iniciativa tiene pocas chances de convertirse en ley porque Cambiemos no tiene la mayoría en Diputados, pero lo que busca la oposición es instalar un tema que incomoda al peronismo. Aún así, buscarán bajarlo al recinto y ponerlo en votación sobre tablas el jueves próximo.

La postura de Cambiemos no difiere demasiado de la propuesta de Sergio Massa de quitar el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) a aquellas personas que tomen tierras por la fuerza. “El Estado tiene que hacer cumplir la ley y, si hay gente tomando tierras lo que tiene que hacer es desalojar. Estamos evaluando quitarle el IFE a los que tomen tierras, sino cada uno hace lo que quiere”, dijo el presidente de la Cámara de Diputados.

Las diferencias dentro del oficialismo parecen profundas, en particular entre los principales responsables de la seguridad en Nación y en provincia. La ministra de Seguridad de la Nación, Sabrina Frederic, aseguró que las tomas de tierras “no son un problema de seguridad” y las atribuyó a un “déficit habitacional”.

Sin embargo, Sergio Berni (ministro de Seguridad bonaerense) dijo las ocupaciones de terrenos ilegales son “un delito” y remarcó que el derecho a la propiedad privada es “inviolable”.

“Es una responsabilidad de seguridad”, aseguró el ministro de Kicillof potenciando la tensa relación que mantiene con Frederic.

 

Las tomas se intensificaron durante la cuarentena. Los casos se repiten en San Fernando, La Plata, La Matanza, Presidente Perón, Marcos Paz, Partido de la Costa. También en el interior bonaerense con casos que fueron públicos en Mar del Plata, Azul y Bahía Blanca.

“Es inadmisible que el gobierno esté justificando la toma de tierras que está sucediendo en varios distritos de nuestra provincia. La ausencia y abandono del Estado frente a esta situación no puede justificarse como una necesidad habitacional”, aseguró Campbell.

En La Plata, el número de usurpaciones es preocupante. Según fuentes del municipio, en total se registraron 40 intentos de toma de tierra desde diciembre del año pasado.

“Dejar que haya usurpaciones no soluciona nada. Viola los derechos de propiedad de los dueños de los terrenos y deja a la gente que los ocupa en una situación precaria, sin una solución definitiva, en barrios que se desarrollan sin servicios ni planificación”, agregó el legislador de San Fernando.

En la provincia ya hubo más de 1800 tomas de terrenos en este año, según una estimación del ministerio de Seguridad. El ministro Berni informó que hay cinco intentos de tomas de tierras por día en la provincia.

“Las tomas de tierras requieren de respuestas y una posición clara por parte de Axel Kicillof. El silencio también es ausencia y abandono. Necesitamos un Estado presente”, aseguró la diputada Gabriela Besana, titular de la comisión de Asuntos del Conurbano en Diputados.

El lunes, los cuatro intendentes del PRO que buscan conducir a la oposición en la provincia salieron en bloque a reclamarle a Kicillof que tome postura frente a la tomas de tierras que se multiplicaron durante los últimos meses en el territorio bonaerense.

Jorge Macri (Vicente López), Julio Garro (La Plata), Néstor Grindetti (Lanús) y Diego Valenzuela (Tres de Febrero) escribieron tuits al mismo tiempo y con un mensaje común: exigirle al Gobernador que tome cartas en el asunto y que ponga un freno a las usurpaciones.

La respuesta del Gobernador fue un tanto esquiva. “Sabemos que existen muchas dificultades para avanzar en las soluciones” a las tomas de tierras. “Tiene que haber una respuesta del Estado”, admitió.

“Es innegable que hay una necesidad”, dijo el gobernador, que consideró que “puede ocurrir” que haya intereses políticos detrás de la toma de tierras, que se multiplican en todo el territorio provincial.

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