Edgardo Cenzón fue un funcionario clave de Mauricio Macri en la Ciudad y del inicio de la gestión de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires. Ocupó varios ministerios y siempre se destacó por su ejecutividad y sentido práctico. Disconforme con el rumbo del gobierno de Macri, al poco tiempo de iniciada la etapa anterior renunció a su cargo y volvió a la actividad privada.
Unas semanas atrás viajó a Europa para visitar a sus hijos que estudian allí. En Barcelona se agarró lo que parecía un resfrío. Fue al médico y como tenía mucha mucosidad, le dijo que se quede tranquilo que no era Coronavirus ya que se supone que no genera mucosidad.
El viernes pasado regresó a la Argentina y un día su mujer tuvo un pico de fiebre de 38 grados. Entonces decidieron llamar al 107 del Same. “Fue impresionante el nivel de profesionalismo. Cortaron la calle, nos subieron a la ambulancia y me internaron en el Sanatorio Anchorena”, recuerda Cenzón en diálogo con LPO desde el Sanatorio donde en horas lo darán de alta, para que cumpla una cuarentena por precaución en su casa.
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