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Caos en la Legislatura de Córdoba: el PJ forzó una votación y la oposición se retiró

Cruces, gritos y acusaciones marcaron otra sesión tensa tras el incumplimiento de acuerdos por parte del oficialismo.

La Legislatura de Córdoba volvió a ser escenario de un escándalo político que terminó con la oposición abandonando el recinto.  El conflicto estalló cuando el oficialismo decidió alterar la modalidad de votación, desoyendo los acuerdos alcanzados en la Comisión de Labor Parlamentaria. Según los bloques opositores, el peronismo cambió las reglas a último momento para imponer su voluntad.

La sesión comenzó con fuertes discusiones y continuos pedidos de cuarto intermedio por parte de la Presidencia. Las negociaciones previas habían establecido que las votaciones serían realizadas mediante el sistema electrónico, pero el oficialismo optó por hacerlas a mano alzada. Esa decisión fue interpretada como una maniobra para controlar el resultado y desatar el caos.

Uno de los legisladores que se retiró del recinto aseguró que el PJ “rompió su propia palabra”. Sostuvo que no se trataba de una diferencia menor, sino de un intento de silenciar debates relevantes sobre el gasto público y el funcionamiento de agencias estatales. Para la oposición, el oficialismo buscó evitar la exposición de temas sensibles para la gestión provincial.

Acuerdos rotos y un bloque oficialista dividido

El conflicto dejó en evidencia las tensiones internas dentro del propio peronismo. La reciente incorporación de un legislador disidente fortaleció numéricamente al bloque oficialista, pero también reavivó las disputas por su liderazgo. Mientras tanto, la oposición acusa al PJ de utilizar su mayoría para “vaciar de contenido” las sesiones legislativas.

Varios legisladores opositores coincidieron en que el incumplimiento de los acuerdos destruye la confianza institucional. Afirmaron que los debates parlamentarios se están convirtiendo en simples formalidades donde el oficialismo impone su agenda sin discusión. En ese contexto, la salida de los bloques opositores fue interpretada como una respuesta política y un acto de protesta.

“Circo” y desgaste institucional

Tras el retiro opositor, el oficialismo minimizó la situación y calificó la reacción como “un show”. Sin embargo, el incidente volvió a dejar al descubierto un deterioro en la calidad del debate público. La sesión se cerró sin tratamiento de los proyectos previstos y con fuertes reclamos hacia el presidente del cuerpo.

El episodio refleja la creciente distancia entre el oficialismo y los sectores que reclaman mayor transparencia y respeto por las reglas legislativas. En medio de un clima político cada vez más tenso, la Legislatura provincial parece más concentrada en sus disputas internas que en resolver los problemas de los cordobeses.

Derechadiario.com