En la antesala de una votación clave en el Senado, el presidente lanzó duras críticas contra los mandatarios provinciales y al Congreso, a quienes acusó de intentar desestabilizar al Gobierno. En una entrevista negó que las provincias estén desfinanciadas y advirtió que cualquier daño legislativo será “transitorio”.
En vísperas de una pulseada clave que se dará este jueves en el Senado de la Nación, donde el Congreso puede provocarle una derrota de proporciones al aprobar leyes que dijo que vetará, mientras que los gobernadores promueven modificar el reparto de recursos de un modo que el Gobierno nacional rechaza, el presidente Javier Milei se plantó con dureza ante los mandatarios provinciales y el Congreso. A los primeros los acusó de querer “romper todo”. Y al Congreso le advirtió que “todo lo que puedan hacer de daño va a tener un efecto transitorio”.
Entrevistado por Luis Majul en El Observador, Milei rechazó que el Gobierno nacional se financie con los recursos que les corresponden a las provincias. “Eso es falso”, rechazó, asegurando que “además la recaudación a los gobernadores les viene creciendo entre 7 y 8% en términos reales. Es decir, están recibiendo un montón de recursos. Y además, partieron de una situación de equilibrio, con lo cual no es que les están faltando recursos; están recibiendo más recursos”, aseguró.
Así las cosas, negó que les corresponda recibir más fondos y, por el contrario, sostuvo que los gobernadores “están desbocados”.
Cuando Majul preguntó si el crecimiento en impuestos se debía al IVA, Milei elevó sus porcentajes, señalando que la recaudación “está creciendo entre el 8 y 10%”. Y explicó: “Cuando vos mirás la recaudación nacional, crece 2% en términos reales, pero lo que tenés que contar es que sacamos un montón de impuestos en el medio”, citando como ejemplo el impuesto PAIS. “Cuando vos corregís por todo eso, la recaudación está creciendo entre el 8 y 10% en términos reales”, insistió.
“¿Entonces por qué piden, están locos?”, le preguntó el periodista, a lo que Milei respondió: “No, quieren destruir al Gobierno nacional”.
Le atribuyó esa intención a todos los gobernadores, “porque en el fondo lo que prueba lo que nosotros estamos haciendo es que lo que se hizo en la economía argentina durante los últimos 100 años está mal. Y que todo eso era malísimo para los argentinos de bien, pero era un negocio enorme para el partido del Estado, independientemente del color político que tengan. Son todos del partido político del Estado”.
“En realidad a ellos no les importa si los argentinos van a estar mejor o peor; a ellos les importa el poder y la de ellos”, sintetizó, para agregar que “este modelo lo que prueba es que ellos son parte del problema, no de la solución”.
Majul le advirtió que si eran todos los gobernadores, eso significaba que tenía a todo el Congreso en contra y no le iba a alcanzar ni para ratificar los vetos. Aprobarían el aumento a los jubilados, lo de las universidades… “Le van a romper todo”, advirtió el periodista, a lo que Milei repuso: “La intención de ellos es romper todo”.
Sucede que, a su juicio si La Libertad Avanza “arrasa” en las próximas elecciones, “ellos se tienen que jubilar y están dispuestos a hacer sufrir a los argentinos; lo que sea necesario”.
El viaje suspendido
El presidente también negó que hubiera suspendido su viaje a Tucumán por la ausencia anticipada de la mayoría de los gobernadores. Insistió en atribuirle la decisión a cuestiones meteorológicas.
Y planteó que “la lectura política que hagan me tiene sin cuidado, porque es un año electoral y cada uno está jugando su propio partido y este tipo de cosas puede pasar”.
E insistió en que viajar en esas condiciones hubiera sido “bastante imprudente”.
Mensaje al Congreso
Cuando el periodista le recordó que este martes avanzaron proyectos en Diputados que el Gobierno rechaza y lo que va a suceder este jueves en el Senado, Milei minimizó el alcance del daño que puedan hacerle: “No va a pasar nada”, garantizó.
“Todo lo que puedan hacer de daño va a tener un impacto transitorio, porque después de que los aplastaremos en las elecciones, yo vuelvo a poner las cuentas fiscales en orden, a la brevedad”, explicó.
Tras aclarar que ese sería el peor de los escenarios, con lo cual no daba por sentado que sucediera, señaló que en ese caso “el impacto negativo es de manera transitoria, pero acá la política del equilibrio fiscal es permanente. Con lo cual, jodan todo lo que quieran, los espero el 11 de diciembre”.
“Se acabó, me importa nada –insistió-. Va a ser solamente un efecto negativo transitorio. Estamos absolutamente tranquilos, no va a pasar nada”.