Hay muchas inconsistencias : las firmas no coinciden , además como hizo el actual gobierno de Bolivia para obtener la presunta carta original del ex embajador argentino en ese pais , que por cierto desmintió la misiva .
Además el presunto material bélico es mas bien anti tumulto y si es una operación clandestina , ers como pedirle factura A al narco que me vendió un Kilo de cocaina.
El comandante de la Aviación estaría agradeciendo la recepción de un material que su fuerza no utiliza: cartuchos anti tumulto y granadas lacrimógenas. En todo caso, ese material le podría interesar al jefe del Ejército. Y además, envía la carta de agradecimiento a un embajador. Álvarez García, por su parte, desmintió haber recibido esa carta y agregó: “dentro de las funciones como embajador no existe forma alguna de autorizar o enviar ningún tipo de asistencia a las Fuerzas Armadas o policiales, y mucho menos material de ninguna clase”.
“La noche del viernes 9 de julio, dos nuevos elementos surgieron sobre la supuesta carta de agradecimiento que el excomandante de la FAB, Gral. Jorge Terceros habría enviado al embajador argentino, Normando Álvarez, en noviembre del 2019. El primero de ello es la certificación que hace el Ministro de Defensa, Edmundo Novillo, que señala que en los archivos de la Fuerza Aérea se encuentra la copia de la supuesta nota, hecho que certifica y legaliza, lo que la constituye en un documento legal. Y el segundo es el sello de recepción de la nota (15 de noviembre de 2019) que la Embajada Argentina asegura cursa en sus registros”.
“La nota en un inicio comprobó que la renuncia de Terceros se realizó el 12 de noviembre de 2019, esto pone en duda que la carta haya sido firmada por él el día 13, sin embargo, no lo comprueba”.
“Por tanto, ante estos nuevos elementos, los varios comentarios de nuestros lectores y la falta de una pericia grafológica obligan a retirar la categoría de “falso” que Bolivia Verifica consignó el viernes, hasta que surjan nuevos elementos que permitan emitir un criterio en torno a su autenticidad”, añade el sitio en su nueva versión.
El defensor de Jorge Gonzalo Terceros calificó de “fantasía” la maniobra del gobierno boliviano. “Esto se va a caer porque tenemos los elementos para demostrarlo”, expresó. Además, criticó a Alberto Fernández por “injerencia en cuestiones internas de los bolivianos”.
“Es una fantasía lo que está armando el gobierno boliviano. Y esto se va a caer porque tenemos los elementos para demostrarlo”, expresó Santisteban en diálogo con La Nación. “A simple vista, esa no es la firma del general. Es una firma dibujada. Cualquier estudio grafológico lo puede determinar”, explicó.
De acuerdo con el abogado, su postura también está respaldada por la fecha de la carta: 13 de noviembre de 2019. “El comandante Terceros estuvo toda la mañana en el Palacio de Gobierno, y eso es muy fácil de demostrar con el libro de entradas y salidas. Y a media mañana, Terceros ya fue relevado de su cargo y reemplazado por el general Orellana”, detalló.
“El general Terceros pasó al servicio pasivo el mismo día en que está fechada la carta. Presentaremos ante la Fiscalía la renuncia que presentó ese día”, abundó el letrado.
Por otra parte, Santisteban condenó con dureza la carta que Alberto Fernández envió para “pedir disculpas” al presidente boliviano por la supuesta maniobra.
“Hay un interés ideológico político de ayudarse entre gobiernos de la misma tendencia. Y esto es una injerencia del gobierno de Alberto Fernández en cuestiones internas de los bolivianos. Esto solo va a profundizar más la situación de convulsión social que hay en el país”, dijo el abogado.
Además, Santisteban argumentó que ese material bélico nunca podría haber sido requerido por un comandante de la Fuerza Aérea de Bolivia (FAB). “Cualquiera se puede dar cuenta de que eso no es material que pueda usar la Aviación. En todo caso es material que podría servirle al Ejército, pero no a la FAB”, dijo.
Tanto Jorge Gonzalo Terceros como Gonzalo Jarjuri Rada, almirante y exjefe de la Armada de Bolivia, están detenidos desde el pasado sábado en Santa Cruz de la Sierra.
INCONGRUENCIA
Karen Longaric, excanciller boliviana, dijo que es “incongruente” la fecha de la misiva, datada el día posterior a la asunción de Jeanine Áñez. “La presidenta asumió el mando el 12 de noviembre por la noche y la supuesta carta de agradecimiento está datada al día siguiente. Entonces es imposible que el eventual pedido y recepción de ese armamento tenga alguna relación con el gobierno de Áñez. No dan las fechas. Si la cooperación existió, fue durante el gobierno de Evo Morales”, expresó.
En esa línea, la exfuncionaria comentó que en la misiva “no se menciona ningún armamento bélico, son armas policiales. Son actos de cooperación normal entre la policía y las fuerzas armadas de países amigos”.
Longaric señaló que tuvo una “relación amistosa con el gobierno de Macri”, pero comentó que su primer diálogo con el expresidente “fue recién en la cumbre del Mercosur en Brasil el 5 de diciembre, cinco días antes de la finalización de su mandato”.
Por último, la excanciller lamentó la detención de Áñez, recluida en una cárcel en La Paz. “Está aislada, como el más peligroso delincuente, con la posibilidad de utilizar su teléfono solo cinco minutos de comunicación por día”. Destacó los problemas de salud de la expresidenta: “Tiene picos de presión muy altos, que ponen su vida en riesgo”.
“Es lamentable que el gobierno argentino se preste a este juego político de persecución a la oposición boliviana que está haciendo el gobierno de Luis Arce”, sentenció.
ACUSACIONES
Las acusaciones contra el Gobierno de Juntos por Cambio comenzaron luego de que Rogelio Mayta, ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, denunciara este jueves que “el gobierno de Mauricio Macri aportó material letal para que se pueda reprimir la protesta social y consolidar el gobierno que rompía el orden constitucional en Bolivia”.
Mayta aportó como testimonio de sus dichos una presunta “carta de agradecimiento” entre funcionarios que detalla el material recibido: 40.000 cartuchos anti tumulto 12/70, granadas de gas y gases lacrimógenos.
El ministro dijo que el supuesto operativo constituye “otro plan Cóndor”.
