El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, remarcó que es necesario reducir al mínimo posible la circulación. Las terapias intensivas al borde del colapso.

(26 de abril de 2021- 0221.com.ar )

La pandemia sigue sin dar tregua y la realidad que se vive en los centros de salud de la Capital Federal y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), las más afectadas por la segunda ola de contagios de COVID-19; es cada vez más preocupante. En ese marco y a menos de una semana del vencimiento del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que estableció las restricciones vigentes hasta el próximo viernes, el ministro de Salud provincial Daniel Gollán pidió hacer un cierre estricto por al menos 15 días”.

“Hay que bajar la circulación a lo mínimo e indispensable”, sostuvo el funcionario y remarcó que esto será clave para poder contener la escalad de los contagios que mantiene al borde del colapso sanitario a todo el sistema de salud público y privado en la región metropolitana.

“Estamos en una situación crítica”, afirmó Gollan esta mañana en diálogo con Arriba Argentinos. A pocos días del vencimiento del DNU del presidente Alberto Fernández, todo indica que las restricciones se mantendrán e incluso se sumarán nuevas medidas que, esta vez, llegarían en forma conjunta entre Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires.

En este sentido, el titular de la cartera sanitaria de la provincia de Buenos Aires subrayó la necesidad de consensuar frente a la gravedad que alcanzó la curva de contagios y pidió “medidas drásticas”. “El AMBA es una única unidad sanitaria”, sostuvo y señaló que “si el AMBA se mueve repercute en todo el país”.

Gollan sostuvo además que “la velocidad con la que avanza (el COVID-19) es la diferencia respecto de la ola anterior” y advirtió sobre lo “terriblemente contagiosa” que es esta enfermedad. “El virus se come a pacientes jóvenes en tres o cuatro días”, resaltó y habló de “bajar la circulación a lo mínimo e indispensable” por lo menos durante las próximas dos semanas.

En cualquier caso, los próximos días serán claves para definir cuanto se profundizará en las restricciones que vencen el viernes que viene, como estrategia para contener el impacto de la segunda ola.