A más de 80 días de la desaparición de Facundo Astudillo Castro, familiares, amigos y organismos de derechos humanos exigen la aparición del joven, visto por última vez el pasado 30 de abril en el sur de la provincia de Buenos Aires. En este caso, Amnistía Internacional Argentina estimuló una original acción global a través de sus ocho millones de integrantes, la cual exige al ministro Berni y al fiscal Ulpiano Martínez que se “redoblen los esfuerzos para tener certezas sobre el caso”.

Ahora bien, desde la organización global señalaron su preocupación por el tiempo que lleva desaparecido, sin indicios de dónde pueda estar. “Lanzamos una acción urgente que básicamente promueve que toda nuestra comunidad internacional, que son más de ocho millones de personas en el mundo, se solidarice con la causa y le transmitan mensajes al Ministerio de Seguridad, así como también a la Justicia Federal, para exigir una investigación imparcial, efectiva y urgente”, expresó García Rey, quien agregó que “el transcurso del tiempo atenta con la posibilidad de poder encontrar a Facundo”.

“Hay ciertos indicios para sospechar que la policía de la provincia de Buenos Aires puede estar involucrada, partiendo desde la base de que la última vez que se vio con vida justamente fue en uno de los operativos de control de la pandemia”, aseveró.

Además, indicó que las primeras investigaciones se fundaron “a partir de la carátula de averiguación de paradero” y en ese tiempo “no se inició ninguna línea de investigación o, peor aún, hubo sospechas de la intervención de la policía bonaerense”, hecho que “atenta claramente contra el tiempo de la investigación”. Desde el organismo, además, sostienen que “hubo una falta de dirigencia en el accionar de las autoridades a la hora de entender la magnitud que podría tener este caso y las distintas líneas de investigación que se deberían haber abierto en función de los hechos”.

“Hay contradicciones muy sospechosas entre las declaraciones y los relatos de las fuerzas de seguridad. Después se suman tres testigos que afirman haberlo visto subiéndose a un móvil policial, todos elementos que hoy exigen una urgencia absoluta de investigación por parte de la Justicia Federal, para que se den garantías de imparcialidad y objetividad, independencia y urgencia en la investigación”, añadió.

Paola García Rey planteó que “no hay lugar para las especulaciones ni la manipulación de información”, dado que es necesario la protección y el cuidado de la familia y su entorno. “Hay afirmaciones aventuradas que, sin dudas, no contribuyen de ninguna manera a la causa ni a la contención familiar”, remarcó, en tanto estableció que el organismo se maneja con “verdades objetivas”.

“No es sólo conocer qué pasó, dónde está, sino eventualmente establecer las responsabilidades del caso”, aseguró. En esta línea, determinó que “es necesario que todas las autoridades dispongan todas las herramientas para ponerse a investigar de manera imparcial”, y sostuvo que “hay una predisposición del estado actual en tanto todo está orientado a encontrar a Facundo y dar con la verdad de los hechos”. Asimismo, comentó que la familia tiene ciertas sospechas de cómo se condujo la investigación de la mano del fiscal.

Por último, sobre la utilización del hecho de desaparición, la directora adjunta de Amnistía Internacional Argentina subrayó que “cualquier tipo de manipulación política por cualquier caso es absolutamente reprochable, y más cuando no se han dado con seguridad cómo fueron los hechos”. (www.REALPOLITIK.com.ar)